¿Alguna vez te has planteado como influye tu personalidad en tu vida actual?
Te animo a que empieces a observar tu propia vida como el efecto de tus pensamientos. Si realmente ya lo has hecho, te sugiero que investigues las causas que han originado esos pensamientos que han creado tu reaidad y te responsabilices por lo que hoy en día estás viviendo.
El objetivo no es sentirte culpable, ni enfadarte contigo mismo, sencillamente ser consciente de que es algo que tú has creado y que tienes el poder de volver a crearlo de otra forma y transformarlo.
Me gustaría saber si en tu vida estás reforzando tu estado de víctima, para no actuar y conformarte con tu realidad, o si por el contrario has emprendido el camino para liberarte de tus limitaciones y vivir la vida que siempre deseaste.
Para ello, en las próximas líneas voy a describir un pequeño listado de patrones y me gustaría que los leyeras y evaluaras si hay alguno o algunos en los que te puedas reconocer.
Toma nota, ¿en qué o cuáles te reconoces?
No te juzgues. No te defiendas. Ahora sencillamente es el momento de investigar para saber qué puntos tienes que mejorar y qué otros debes soltar para cambiar tus creencias y ser más feliz en la vida.
Patrones Liberadores:
Inicio acciones para solucionar situaciones que me están creando tensión.
Decido yo mismo sobre mi camino, mi destino, mi vida y mis acciones.
Me atrevo a asumir riesgos.
Pongo todo mi énfasis y enfoque en el ahora.
Hago solamente una cosa a la vez o una actividad a la vez.
Me responsabilizo de mis emociones
Vivo para el crecimiento y el descubrimiento.
Presto atención a los demás
Me doy cuenta que yo soy la causa de mi situación actual
Me atrevo a investigar mis motivos verdaderos
Aprendo de mis errores
Me atrevo a disfrutar del aquí y del ahora
Soy yo mismo cuando me relaciono con otras personas
Me acepto tal y como soy y me dedico suficiente tiempo y amor para crecer pasito a pasito
Puedo perdonar
Quiero escuchar de verdad
Patrones Tóxicos
Estoy esperando hasta que las cosas se solucionen por si mismas
Dejo que los demás decidan y yo poquito a poco me adapto
Me mantengo en mi zona de confort.
Estoy atrapado en remordimientos por el pasado y preocupaciones por el futuro
Intento hacer de todo a la vez
Les echo la culpa a los demás de cómo me siento yo ahora
Estoy defendiendo lo que he adquirido
Grito por atención
Culpo a los demás o a las circunstancias
Quiero conseguir que me den la razón
Sufro bajo mis errores
Estoy planificando para disfrutar más tarde, en el futuro
Estoy asumiendo un rol por el miedo al rechazo
Estoy insatisfecho y vivo sumido en la crítica hacia mi mismo
Soy rencoroso.
Solo escucho para poder dar respuestas y convencerles de mis razonamientos
La pregunta más importante ahora mismo es:
¿y ahora qué vas a hacer con ello?
Sandra Marín /Mikah de Waart
sandra@mikahdewaart.com
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