Aquellos que estáis habituados a estudiar sobre temas de empresa como los de liderazgo, gestión del cambio en organizaciones, innovación, creatividad… seguro que estáis acostumbrados a leer sobre los teóricos atributos (“skills”) que debería tener un líder para ser un verdadero líder, uno con éxito.
Sólo a título de ejemplo mencionar algunos de los que George Klemp en 2001 incluyó como los atributos claves de un buen líder:
1. Integridad/honestidad/ética
2. Focalizado en los objetivos
3. Astucia personal
4. Orientación a la formación continua
5. Habilidad para influir
6. Pensamiento estratégico
7. Flexibilidad, adaptabilidad
8. Confianza y coraje
9. Iniciativa y orientado a la acción
10. Comunicador
11. Energía y entusiasmo
12. Astucia política
13. Pensamiento analítico
14. Visión de negocio
15. Capacidad de decisión
16. Creatividad
17. Perspectiva global
18. …
Hay otras muchas listas de habilidades que un líder debería tener para ser exitoso y seguro que cada uno de nosotros podría añadir, quitar y ordenar de mayor a menor importancia estas habilidades según nuestros propios criterios.
¿Pero que tiene que ver esto con el Kárate?
Aquellos que no estáis habituados con el Karate podéis llegar a pensar que es un deporte violento, de lucha, agresivo, pero nada más lejos de la verdad.
¿Qué significa KARATE?
KARA se traduce del Japonés como “vacío”, TE se traduce “mano” y DO se traduce como camino.
KARATE-DO se traduciría como “el camino de la mano vacía”.
De hecho el Karate se considera un ARTE marcial.
Los principios fundamentales del Karate-Do son:
1. Perfección de la personalidad
2. Guardar siempre fidelidad
3. Esfuerzo y constancia
4. Respeto a los demás
5. Reprimir la violencia
En estos principios se basa el Karate-Do y son los que debe transmitir el Sensei (el maestro), y ¿quién puede decir que no se trata también de principios que nos pueden ayudar en nuestro camino como líderes?
Si hacemos una comparación simple entre las dos listas anteriores podríamos identificar la perfección de la personalidad con la integridad, la honestidad, la ética, la confianza, la formación continua, perspectiva global…, guardad siempre fidelidad con la lealtad, la flexibilidad, la adaptabilidad…, el esfuerzo y la constancia con la energía, el entusiasmo, el coraje, los objetivos, la iniciativa, la creatividad, la acción…, el respeto a los demás con la honestidad, la ética…, reprimir la violencia con el pensamiento estratégico, la habilidad para influir, la comunicación…
Por supuesto que en el desarrollo personal del Karate es muy importante lo que el Sensei nos transmite, la forma, los objetivos personales y la personalidad de cada uno, pero de igual manera en nuestra gestión como líder también es muy importante nuestra personalidad, nuestros objetivos personales, los valores que nuestros padres nos transmitieron y también la visión, misión y sobre todo los valores de la empresa donde trabajamos.
En mi experiencia personal os puedo decir que el Karate me ha ayudado a afianzar esos valores, por supuesto que me ha dado más seguridad frente a potenciales riesgos en mi vida diaria en Barcelona y cuando estoy de viaje y sin olvidar la mejora innegable de la salud al realizarse de forma regular.
Bueno, espero que estéis de acuerdo conmigo que alguna relación puede haber entre Liderazgo y Karate, o por lo menos os haya hecho pensar un poco sobre ello.
Francisco Heras
HERAS CHEMICALS
