“un cuerpo activo es un cuerpo que no envejece” Coco Comín
COCO COMIN pone en marcha “GOLDEN GIRLS”, un nuevo curso dirigido a mujeres ex bailarinas mayores de 50 años
l’ESCOLA COCO COMIN ha iniciado las clases de Jazz “GOLDEN GIRLS”, una iniciativa a la que se han sumado mujeres ex bailarinas de entre 55 y 68 años con el objetivo de recuperar su pasión por la danza.
El objetivo de este nuevo curso, que imparte personalmente la directora COCO COMIN, es acoger a todas esas mujeres que han dedicado buena parte de su vida a bailar, algunas con amplios conocimientos académicos e incluso experiencia sobre el escenario, pero que, con el paso del tiempo, se han visto desplazadas por nuevas generaciones de estudiantes que llenan las aulas de energía y vigor.
“La danza nunca os hará pasar vergüenza, todo lo contrario, aumentará vuestra autoestima, tengáis la edad que tengáis”, advierte COCO COMIN, quien concluye que “un cuerpo activo es un cuerpo que no envejece”
El curso, abierto a cualquier bailarina de nivel intermedio de más de 50 años, ha surgido como respuesta a la demanda explícita de antiguas alumnas de l’ESCOLA que pedían a COCO COMIN unas clases a su medida, ya que, desde que dejaron el centro, “se ven viejas entre tantas jóvenes”, explica la directora, quien añade que, en los últimos años, no han sabido encontrar su propio lugar a pesar de haber emprendido actividades diversas para mantenerse en forma y también con un objetivo social, además de físico y psíquico.
Según COCO COMIN, “estas mujeres decididas y emprendedoras quieren recuperar la felicidad que les aportaba la práctica de la danza, desean revivir la sensación de fortalecer la voluntad, de la tensión constante del espíritu, de que el corazón lata con fuerza y de sentirse vivas; aquel añorado ejercicio físico planificado, que requiere de un cuidadoso aprendizaje, repetición y perfeccionamiento…”
En definitiva, el curso “GOLDEN GIRLS” significa un reencuentro con todas aquellas antiguas bailarinas que quieren seguir reforzando sus facultades musculares y cerebrales, y hallar de nuevo el placer indescriptible que circula por el ambiente en una clase de danza y que, a través de la música, crea un lazo de unión entre todos los participantes.
“La danza nunca os hará pasar vergüenza, todo lo contrario, aumentará vuestra autoestima, tengáis la edad que tengáis”, advierte COCO COMIN, quien concluye que “un cuerpo activo es un cuerpo que no envejece”.